Hay labios que sienten, saborean mientras digieren sus palabras. Entretanto su mirada , más allá de ver... tan solo, lee, escucha, siente y escribe...

jueves, 30 de agosto de 2012

Versiones


 
Llevo seis meses viviendo en la misma ciudad. Las mismas calles me sirven de alfombra día tras día, siempre igual. Miro mis pies mientras camino, intentando tomar conciencia de que en realidad sucede, pero por más que confirmo la actividad de mis pasos, al levantar la vista tengo la impresión de seguir siempre en el mismo sitio. Las mismas casas, los mismos comercios, la misma gente, los mismos parques...   Y me balanceo a diario en el mismo columpio. Al acabar mi jornada laboral, siguo con el ritual. Una cerveza en el bar que hay debajo de casa. Ese es el mejor momento del día. El camarero es un tío estupendo. Siempre cenamos a la misma hora,( yo creo que la otra mitad del bocata que pido se la come él, a veces, no sé que pedir por que no sé de que le apetece.)  Nos miramos y escuchamos la música.  Cada día me saca el tema de  la música, me hace estrujar los sesos hasta hacerme rebuscar en los rincones más recónditos de mi memoria, entonces subimos a casa.  Cuando encuentro entre mi ordenado desorden - siempre ríe la canción mencionada, él Cd en mano, sale pitando mientras me grita ¡ te espero  ! 
Después me preparo un baño y pienso – luego bajo...
y me quedo pensando en el verdadero motivo por el cuál no bajo.

  Todo es cíclico,  simple, aparentemente sencillo y sin embargo sigue resultando tan controvertido...
 
  . . .

 
Es su sexto mes de independencia. Le crecieron unas alas en la espalda... Las calles de la ciudad        – me dice,   cambian a diario, nunca las mismas prendas se ven colgadas en los tendederos. Las personas, nunca miran hacia el mismo lugar salvo a excepciones.
 Recuerda su pequeño pueblo. Quizás vaya a pasar las vacaciones pese a saber que todo sigue en el mismo lugar, de tanto en tanto necesita saber que lo sólido permanece. Frecuenta mi local, - aquí la conocí.   Compartimos el bocata a diario,  ( siempre pide uno pequeño y yo me quedo su mitadcreo que lo sabe, entonces me mira, nos miramos - delicioso. Sólo pensar que nuestras bocas comparten, me hace feliz.   Sé que le gusta la música, cada día le acabo sonsacando uno de sus temas favoritos y entonces subimos a su casa. Ella busca entre su desorden y cuando lo encuentra, raudo se lo arrebato y salgo pitando. - he dejado el bar sólo.  Ella me dice que luego bajará, jajaja... Nunca lo hace,  lo sé.
Su '' luego'' acaba resultando ser al día siguiente a la misma hora, tras finalizar su jornada laboral.
 
Entonces le pongo la canción que a ella le gusta tanto...
 
http://youtu.be/O-Y20wUnRBE












Los Amantes. RENE MAGRITTE
 
 

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